El hombre, de 44 años, vecino de Pasaia ha fallecido este domingo al caerle unas piedras sobre la cabeza, cuando regresaba de realizar una vía ferrata, con un grupo de montañeros, en los Mallos de Riglos, en Huesca.
El grupo regresaba al lugar donde habían aparcado los vehículos, después de haber finalizado la ruta, caminaban por un sendero estrecho. Los cuatro compañeros que iban con el vecino de Pasaia, caminaban delante u escucharon un ruido junto a la pared, al parecer producido por la caída de una piedra, al volver la vista vieron como este hombre se desplomaba en el suelo y quedaba inerte.
Avisada la Guardia Civil, un helicóptero se desplazaba hasta la zona con el equipo de montaña de Huesca y un médico a bordo. Pero cuando lograron acceder al lugar del siniestro, el facultativo sólo pudo certificar la muerte del hombre. A pesar de llevar casco, el fuerte impacto de las piedras, le causó la muerte instantánea.
