El informe presentado por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, en el que hace un diagnóstico de la situación social y económica y detalla las propuestas para alcanzar una estrategia con la vista puesta en 2050 «recomienda prohibir los vuelos en aquellos trayectos que puedan realizarse en tren en menos de 2,5 horas» para reducir a 2 millones de toneladas las emisiones del sector del transporte.
Asimismo, se plantea ajustar la fiscalidad del transporte por carretera al uso real del vehículo, es decir, pasando de los actuales figuras fiscales sobre la compra, circulación y combustibles, a un impuesto sobre el uso medido real del vehículo que tenga en cuenta sus características, como el peso, potencia, emisiones de contaminantes atmosféricos y gases de efecto invernadero.