Los vecinos de Gros han comenzado una campaña de buzoneo de pasquines y de colocación de crespones negros contra el derribo del edificio.
Esta semana, el barrio de Gros comenzaba las movilizaciones para salvar el edificio Miracruz 19, un emblema del barrio que con el derribo y la reforma previstos, perderá su fachada original.
Algo a lo que los vecinos de Gros se han opuesto desde el primer momento, una oposición que empieza ahora, como ya habían anunciado, a materializarse en diversas iniciativas.
Varios vecinos y miembros de la Asociación en Defensa del Patrimonio Cultural de San Sebastián se reunieron la pasada semana con el alcalde, Eneko Goia, y el concejal de Urbanismo, Enrique Ramos y exigieron que al menos la promotora que reformará el edificio mantenga la fachada actual.
Los vecinos están pidiendo a los residentes de la calle Miracruz y de otras aledañas que cuelguen lazos en sus ventanas y balcones crespones negros, en señal de luto, para mostrar su rechazo al proyecto. Además, han diseñado un cartel para que los comercios lo exhiban.
A esto se une una campaña de buzoneo de pasquines que se está repartiendo por todo el barrio, para concienciar a los vecinos sobre la pérdida de ese edificio y del valor que representa.
