Los datos recabados por la Unidad Contra las Redes de Inmigración y Falsedad Documental han descubierto que en una vivienda de Arrasate se estaban cometiendo numerosas irregularidades, fundamentalmente empadronamientos ficticios, suficientes como para detener al titular de la misma.
La Policía le acusa de haber facilitado el empadronamiento a 89 inmigrantes en su domicilio, presuntamente a cambio de pagos y que de este modo pudieran acceder al cobro de ayudas, acceder a sanidad pública o incluso solicitar permisos de residencia en España.
Los delitos que se le imputan al titular de la vivienda son de estafa y falsedad documental. Por ello se pide una multa contra él por un importe de 150.000 euros. Además, a siete de los inmigrantes que se ha podido identificar y localizar y que habría procedido al falso empadronamiento en esta vivienda, se les impondrá un sanción de 1.503 euros.